Tuesday, May 12, 2009

Dark Sector.. reseña ....Van a rodar cabezas




Unreal y Unreal Tournament son dos juegos difíciles de olvidar. Ambos salieron de los estudios Digital Extremes que, tras un tiempo de colaboración con Epic, decidió lanzarse a la aventura de crear sus propios juegos. Así fue como nació Dark Sector.

Hace ya más de cuatro años que fue anunciado para las consolas de nueva generación. En primer lugar utilizaba un motor llamado Sector para después pasarse al multiusos Unreal Engine 3.0.

Seguramente esa sea la razón de los múltiples retrasos del juego, según las críticas al motor de la propia compañía. Se llegó a pensar que el juego estaba cancelado por las dificultadas por las que estaba pasando su desarrollo . Por suerte nos equivocamos y hoy le damos un repaso a la creación que tantos años de trabajo han invertido: Dark Sector.


La oscuridad de Dark Sector: Los personajes y la historia

La historia nos sitúa en el pellejo de Hayden Tenno, un agente de las fuerzas especiales de Estados Unidos (para variar) que se infiltra en terreno soviético para prevenir un contagio mundial de un virus llamado Technocyte.

El personaje tiene tan poco carisma que difícilmente recordarás su nombre mientras la historia nos conduce a tumbos objetivo tras objetivo a parar la amenaza del virus. El doblaje en castellano, aunque se agradece enormemente, no ayudará a cogerle cariño a Hayden.

Pese a las carencias en ambos apartados, algunos diseños son más que acertados (con la obligada mención del enigmático némesis metálico con la gigantesca Glaive y el propio personaje en una etapa más avanzada del juego). Los enemigos, sin embargo, suelen ser bastante sencillos y repetitivos aunque esto propicia que en ocasiones seamos atacados por pequeños ejércitos de ellos.

No todo es negativo: Gráficos y jugabilidad

La puesta en escena es maravillosa. En una primera fase grisácea se nos presenta a piñon el protagonista y el guión. La primera toma de contacto muestra unos gráficos sobresalientes, de esos que alegran a la vista. Además, tras unos segundos, descubriremos que el personaje responde ágil a los movimientos. Una jugabilidad que toma, sin esconderlo, muchas referencias a Gears of War.

Al final de la primera fase ya quedaremos infectados por Technocyte y nuestro brazo derecho mutará en algo metálico, mutante y bello. Muy bello.

Desde la primera toma de contacto el juego nos ofrecerá escenas macabras. No sólo por el hecho de toda la sangre que tus enemigos van a esparcir en el escenario, con amputaciones incluidas, si no por las bolsas con restos humanos que hay esparcidas por todas las pantallas o monstruos deformes que un día fueron humanos. Estos detalles que se muestran sin tapujos ni vergüenza se agradecen. Una ciudad con tintes apocalípticos.

Dark Sector atesora una jugabilidad divertida y sencilla. Como ya hemos comentado anteriormente, Dark Sector bebe directamente de Gears of War (algo que queda claro sólo con ver como corre nuestro personaje). Manejar la Glaive se convertirá un buen hobby para hacer que rueden cabezas. Además en ocasiones nos asaltará algún QTE o tendremos la opción de rematar, a sangre fría, a nuestros enemigos.

Tras varias horas algunos puntos del juego pueden volverse algo repetitivos, aunque siempre hay nuevos desafíos junto con algún puzzle que puede volverse desquiciante. Algunos jefes finales nos pueden poner un poquito de los nervios, pero justo esa sensación de no explicarte el punto débil del enemigo lo hace más desafiante.

Un arma de lo más cool

Desde luego el mayor aliciente del juego será la Glaive, un arma arrojadiza con la que podremos ir troceando enemigos y solventando algunos puzzles del juego. A medida que vayamos avanzando en el juego, nuestra querida arma irá mejorando para ofrecernos nuevas y macabras formas de despedazar a todo bicho que se cruce en nuestro camino.

Por si fuera poco, la Glaive puede adquirir distintos elementos como el hielo, el fuego o la electricidad. Esto no sólo nos será útil para acabar más eficazmente con nuestros enemigos, sino que además serán una parte importante en algunos puzzles del juego.

Además de la Glaive, también tendremos la oportunidad de usar armas, pero no cualquiera. No podremos usar las armas de nuestros enemigos salvo por un breve lapso de tiempo, ya que detectan la enfermedad y se desactivan solas. Esto hará que tengamos que estar bien atentos a nuestras reservas de munición.

Evidentemente nosotros podremos portar dos armas: una de pequeño calibre, como una pistola, y otra para asuntos más feos, como una escopeta o un rifle. El uso de la pistola será idónea para usar a su vez la Glaive, ya que podremos manejar el arma con la mano izquierda, mientras que la segunda arma necesitará las dos manos en contrapartida a su poder destructivo.

Por si fuera poco, a lo largo del juego podremos encontrar mejoras para las armas y un mercado negro dónde comprar nuevas y personalizar las que tengamos, algo que da un poco de vidilla a nuestro arsenal.

mos comentado, el juego ofrece un escaso modo multiplayer con dos tipos de juego. No son nada destacables convirtiéndose, seguramente, en el punto más negativo del título. Pero si lo que quieres es disfrutar del modo Historia, Dark Sector sí puede convencerte.

Quizás hemos llegado a un punto dónde este tipo de juegos ya no llegan a sorprender tanto. Si Dark Sector hubiera estado presente en la salida de la nueva generación se hubiera convertido en un claro referente del género. Hoy en día queda a la sombra de juegos como Gears of War, una sombra que bien cobija y desde la que ofrece interesantes y novedosos detalles.



fuente

wildgames.es/resena-dark-sector-360-ps3/

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